jueves, 18 de agosto de 2016

Desligarse un poco

Paso a paso es la forma más fácil de ir despidiéndose de esas cosas que a uno le hacen mal.
Cuando me fui a vivir a Mexico tenía 29 años y muchas ganas de seguir aprendiendo sobre el mundo mobile, que es a lo que me dedico.
Llegar ya implicaba una carga de trabajo del tipo: buscar depto, sacar los papeles, que mi marido consiga trabajo, integrarme en una nueva empresa, conocer gente, etc. etc. Un sobre estrés.
A casi un año de ese momento estresante pero tan significativo, la vida me dio un vuelco de 180 grados y ahora me encuentro en mi departamento a las 15:35 hs de la tarde escribiendo en un blog.
Porque ya no trabajo más en esa empresa, ni en la siguiente empresa en la que trabajé por 3 meses, no, ahora estoy trabajando para mi.
Conocí mucha gente en ese camino de cambiar de empresas y demás, algunos muy buenos y otros que sinceramente es mejor olvidar. Esas personas que te dicen que te están ayudando pero realmente lo único que sacan es un beneficio propio. Si, es verdad te ayudan pero solamente si es bueno para ellos.
De cualquier forma, trabajar para uno mismo significa poder tomarte el tiempo que quieras, pero al ser tu empresa querés estar todo el tiempo pendiente. Pero eso si, no hay satisfacción más linda que ver que todo el dinero que estás ganando va a tu bolsillo.
Igualmente todos los días me recuerdo a mi misma: No te olvides que el dinero no hace a la felicidad. La plata va y viene. Lo más importante es el amor y la salud.

Desliguémosnos de las cosas materiales un poco, dejemos que nuestro pelo no sufra más con la tintura y mostremos nuestras canas, dejemos de comprar ropa solo para estar a la moda, hay gente que no tiene ni para comer, dejemos de quejarnos de todo un poco, recordemos lo mucho que tenemos.